- 平鑫
- Boca de piedra de Ningxia
- 15 días
- 10.000 toneladas
Aleación de hierro, silicio y manganeso utilizada en metalurgia, industria de fundición, en la producción de electrodos de soldadura, etc. El contenido de manganeso es del 65 al 75 por ciento.
Aumentar el contenido de elementos de aleación: Aumentar el porcentaje de silicio y manganeso puede mejorar la resistencia del acero. El silicio contribuye a la templabilidad del acero, mientras que el manganeso mejora la velocidad de endurecimiento por trabajo y la resistencia del acero.
Control de la tasa de enfriamiento: La velocidad a la que se enfría el acero después del procesamiento puede afectar significativamente su resistencia. Velocidades de enfriamiento más rápidas (templado) pueden dar lugar a un acero más endurecido y resistente.
Tratamiento térmico: Un tratamiento térmico adecuado, como recocido, templado y revenido, puede refinar la estructura del grano y aumentar la resistencia del acero.
Microaleación: Agregar pequeñas cantidades de otros elementos como niobio (Nb), vanadio (V) o titanio (Ti) también puede mejorar la resistencia del acero mediante mecanismos como el endurecimiento por precipitación y el refinamiento del grano.
Tratamiento Termo-Mecánico (TMT): Se trata de procesos controlados de laminado y enfriamiento que pueden dar lugar a una microestructura de grano fino, lo que contribuye a una mayor resistencia.
Trabajo en frío: Deformar el acero a temperatura ambiente puede aumentar su límite elástico mediante el endurecimiento por deformación.
Rodamiento controlado: Este proceso implica laminar el acero a temperaturas más bajas que la laminación convencional, lo que puede dar lugar a una estructura de grano fino y una resistencia mejorada.
Enfriamiento ultrarrápido: Las nuevas tecnologías permiten velocidades de enfriamiento ultrarrápidas que pueden producir acero con excelentes propiedades mecánicas.
Aditivos: El uso de ciertos aditivos durante el proceso de fabricación del acero también puede afectar las propiedades finales del acero.
Control de calidad: Garantizar que el acero esté libre de impurezas y tenga una composición uniforme es crucial para lograr la resistencia deseada.